CONCIENCIA ROSA.

Por: Ale Pasquel

Desde hace ya algunos años dedicamos el mes de octubre a aumentar el nivel de conciencia de la sociedad sobre los beneficios que tiene la detección temprana del cáncer de mama. Nos invaden anuncios, carreras, programas, espectaculares y todo tipo de información que busca hacer eco de testimonios que vemos, muchas veces, lejanos. Pero, ¿de qué se trata todo esto, en realidad?

El mes rosa nació hace 35 años aproximadamente, con una carrera deportiva en Estados Unidos, que hacía alusión a las víctimas que padecían este cáncer. Posteriormente se empezó a realizar esta carrera anual en otros estados de la unión americana hasta que se estableció que todo el mes de octubre se trataría de la concientización sobre cáncer de mama.

Seguramente tienes a alguien cercano o conoces a alguien que padece o padeció cáncer de mama, y es que, déjame decirte, que el cáncer de mama es la principal causa de muerte entre las mujeres mayores de 25 años en México. Y según datos de la OMS, se estima que a nivel mundial se registran 1.38 millones de casos, de los cuales 458 mil terminan en deceso. Se trata de una cifra alarmante que nos invita a reflexionar y a buscar unirnos a esta causa, ¿pero de qué manera?

Es muy fácil, bien dicen que es mejor prevenir que lamentar. El primer paso que debemos seguir las mujeres es la autoexploración, logrando de esta manera reconocer signos anormales, que a su vez pueden llevar a un diagnóstico y a recibir un tratamiento oportuno. Es necesario generar entre nuestras hermanas, madres, amigas esta cultura de prevención, de no tener miedo, de enfrentarnos a las cosas que resultan desconocidas.

Y es que, dentro de todo este mensaje, quiero pedirte que no olvides que a todas nos puede pasar. Lamentablemente esta enfermedad no distingue edad, estatus social, estatura, ni ningun tipo de condición, y no busco alarmarte, sino darte un consejo simple y que seguro has escuchado una infinidad de veces: “tócate”. Así como lo oyes: “tócate”, te lo aconsejo como mamá, hija, hermana, amiga, prima, tía, sobrina que busca hacerte despertar para que, de esta manera, nunca te sorprenda el cáncer de mama.

Mi intención es que te unas a esta causa que, como bien decía un médico, tu cuerpo habla. Conócelo, escúchalo, cuídalo y apapáchalo. Es momento de dejar de exigirte tanto, tratándo de controlar tu eternidad, olvidándote del presente. Recuerda que únicamente tú tienes el poder de elección sobre ti mismo. No esperes a que esta situación le pase a alguien cercano a ti, o incluso a ti, para actuar a tiempo. Y si a ti ya te tocó esta sensibilización, ayuda a promover esta lucha, vamos a ayudar a generar más y más conciencia hasta lograr ese efecto, esa frecuencia de la que todos hablan, leen, y de la que ya he escrito en ocasiones anteriores, y que es sinónimo del amor por una misma.