La pausa que resetea el metabolismo

Cambiar los horarios en los que comes puede marcar una gran diferencia en tu salud metabólica y composición corporal.

El ayuno es muy común desde hace siglos en varias religiones, desde los cristianos que lo hacen por concentrarse en la oración, los judíos que ayunan 24 horas para limpiarse ellos mismos en el Yom Kippur, los musulmanes desde el amanecer hasta la puesta del sol un mes entero durante el Ramadán y otros lo practican para traer claridad a sus pensamientos purificar o energizar sus cuerpos y ser más productivos. 

Así que es claro que no es una práctica moderna ni una dieta más sacada de la manga, es una práctica que hasta hoy es conocida por sus grandes beneficios. 

¿Qué tienes que hacer para empezar? 

Es entender que este es un estilo de vida, una herramienta que usarás para que tu organismo descanse de estar comiendo durante todo el día, vas a escoger una ventana de tiempo en la que vas a alimentarte y una ventana en la que no  comerás, pero si deberás,  ya que la clave del éxito de un buen ayuno es la correcta hidratación y es que no se trata de recortar calorías o no comer sino todo lo contrario, cuando te alimentes durante tu ventana de ingesta deberás comer “ad libitum” que quiere decir comer a tu antojo sin restringir calorías comiendo con una densidad nutricional correcta a tus necesidades, te sorprenderás de qué tan satisfecho te sentirás durante tu ventana de alimentación y durante el resto del día.

En la ventana del ayuno podrás ingerir agua, café, agua mineral, siempre y cuando las bebidas sean libres de azúcar. Ya que no debes estimular la insulina. 

Si una mejor salud y la pérdida de peso son tu objetivo entonces debes asegurarte de omitir la comida chatarra y las calorías vacías durante tu ventana de alimentación y recargarte con opciones nutritivas. Esto no es la típica dieta en la que restringirás  calorías, el ayuno intermitente apunta el tipo de combustible que estás quemando mejora el funcionamiento metabólico general, la manera en la que tu cuerpo trabaja que incluye el control de la glucosa la sensibilidad a la insulina, presión arterial y los niveles de colesterol, el ayuno intermitente causa que tu cuerpo trabaje quemando preferentemente grasa no glucosa que viene de los carbohidratos que consumimos constantemente durante el día prácticamente cada 3 o 4 horas y acumulandolos en forma de grasa elevando nuestra insulina y la glucosa causando estrés en nuestro organismo. Así que ahora ya lo sabes : ¿no sería bueno empezar a dejar descansar el organismo?

Por: Brenda Alejandra Domínguez Contreras. IIN Health coach 

IG: @brenfoodandsoul